Estas Navidades han sido sin duda especiales. Son las primeras que paso con mi niña en la barriga, tambien las primeras que paso sin Luis desde que nos casamos (aunque afortunadamente sólo faltó unos pocos días). También son las primeras desde hace muchos años, en las que no trabajo, y de las que puedo disfrutar mucho más.
La Navidad siempre es especial cuando te rodeas de las personas más importantes para ti, son días de recordar, de añorar, de reencuentros, de agradecer...
A pesar de estar tranquila y de tener una super mamá (que no sólo cocina estupéndamente, si no que está pendiente de que no me canse, o de que no haga esfuerzos), ya se nota que estoy en la recta final del embarazo: me duele mucho la espalda, ahora empiezo a tener ardor de estómago, se me hinchan los tobillos... En fin, lo normal.
A todos los que gastais un poquito de vuestro tiempo leyendo mi blog, desde el fondo de mi corazón os deseo... FELIZ NAVIDAD.